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La obra pictórica de Remy de Quintana, en la sala de exposiciones del Charco de San Ginés

El alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, inauguró anoche, en la Sala de Exposiciones del Charco de San Ginés de Arrecife, la muestra colectiva Mojados de Sal, que permanecerá en la capital de la Isla hasta el próximo 31 de marzo. La exposición del colectivo cultural Viera y Clavijo, integrado por los pintores Asunción Fuentes, Francisco Hernández y Remy de Quintana, traslada al espectador a los orígenes de Canarias, “transportando en sus lienzos sus más íntimas imágenes”.

 

Cándido Reguera invitó a los arrecifeños a acudir a esta muestra colectiva, en la que “si bien cada artista cuenta con singularidades propias de su obra, todos ellos coinciden en la importancia de la sal en una isla como Lanzarote, así como del mar y su influencia”.

Según el primer edil capitalino, la exposición pictórica hace un recorrido por la inmensidad de Canarias, “a través de la capacidad observadora de estos tres artistas y su talento para captar instantes naturales, situaciones casuales o la belleza paisajística a la que contribuye el aire”.

Por su parte, Remy de Quintana, que estuvo arropada anoche por numerosos amigos, señaló que “Canarias es una importante fuente de inspiración de artistas”. “Por ello, y bajo el lema de Viera y Clavijo”, -añadió- “un grupo de pintores, cuál navegantes, cruzamos el Atlántico, para transportar en nuestros lienzos nuestras más íntimas imágenes,”.

De Quintana explicó que la muestra indaga en el origen de Canarias, que “también es un poema”, así como “en el insondable origen de su aire, que es un misterio, ya que cuando las islas surgieron del mar, el aire ya estaba ahí y cada isla tiene su aire particular”. “Una mezcla de silencio y sal y un aire salino que se palpa en Canarias y que ha modelado sus paisajes y ha sido fuente de inspiración para los artistas”, matizó la artista.

La pintora recordó además, en la presentación que hizo de la exposición colectiva Mojados de Sal, que ya el mismo Humbolt, con su sabiduría de científico, hace más de 200 años dijo “que los aires isleños eran diferentes, como un gran brazo que viniera del mar”. “Y de Nivaria a Arrecife, una ciudad que emerge del mar. De este mar y de este salitre, sus hombres encontraron una forma de subsistir y llenaron la isla de sonrisas salineras, para la conservación de su sustento”, concluyó la pintora arrecifeña.

 

 

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