¿Me quedo, me voy o me quedo yéndome?

¡Comienza el baile! (IX)

La fotografía que publicó esta semana  en su perfil de facebook  Oswaldo Betancort, abrazado a  "su querida amiga del alma" Gladys Acuña, inhabilitada judicialmente como alcaldesa y parlamentaria como independiente en el grupo de Nueva Canarias , ha levantado ronchas en el seno de Coalición Canaria. Especialmente en el municipio de Yaiza, donde sus compañeros de partido han manifestado en varias ocasiones, en "petit comité", pero sin esconderse ni arrugarse,  su malestar por las exhibiciones públicas que hace de esa amistad "políticamente incorrecta"  el alcalde de Teguise, y vicesecretario general de la organización en la isla.

En Yaiza, pero no sólo allí, hay malestar con lo que entienden "un exceso de personalismo" de Oswaldo, que pone por delante sus aspiraciones personales de las del propio partido.  Por una parte, la foto de marras, y, por otra, sus declaraciones manifestando su intención de hacer doblete en las próximas elecciones, para compatibilizar su presencia en el Ayuntamiento con escaño, principalmente en el Parlamento, tiene a muchos de su compañeros con un estrabismo extraño, en su intención de prever qué quiere hacer realmente Oswaldo.

La cuestión no es baladí, por absurdas que puedan parecer esas valoraciones por ese hecho de carácter personal,  circunscrito a un acto familiar, de esos que ahora en mayo se repiten con liturgia y ropita de marinerito por todos lados. Y no lo es porque no se cuestiona el derecho de Oswaldo a ir a las comuniones que le dé la gana, y de ser amigo de quien quiera, más todavía si  se trata, como es el caso, de una amistad sincera, larga, y que se coció en un ambiente familiar de mucho cariño, al que se sumaron sus respectivas parejas, hoy familias consolidadas ambas, en sus tiempos universitarios en tierras grancanarias. Pero sí que se exhiba esa foto en redes sociales y se convierta casi en viral en la isla al ser compartida, con fruición, por amigos y enemigos, en unos momentos en los que los cenáculos políticos están en plena efervescencia.  Y lo saben los dos protagonista. Que uno la publica y la otra la comparte de forma rápida y veloz.

A nadie se le esconde, mucho menos a los que juegan por interés, que en la batalla por desbancar a Pedro San Ginés de la Presidencia del Cabildo se está cociendo en el centro izquierda de la isla una operación que empezó siendo de acoso y ahora se pretende que sea de derribo en las próximas elecciones, reforzando sus números con la captación para la causa de todo el que pueda sumar en el propósito. Ya cuenta con Nueva Canarias para intentar también el desembarco en el Cabildo con gente de más confianza que Juan Manuel Sosa, que ya cambió de nido y no quiere saber nada del cuentista político Armando Santana, que migró del  PP a Nueva Canarias declarándose nacionalistas de toda la vida, y abrazándose al PSOE, a través de Carlos Espino, en onda amiga, por si acaso.  

Pero Nueva Canarias en Lanzarote es un simple cascarón  grancanario, con Armando dentro cobrando un sueldo por mantener las puertas abiertas hasta que llegue "la revolución soñada". Román Rodríguez  y su cúpula saben que con el empleado Armando no aspiran a nada. Que de seguir así, hasta Mame Fernández, el hombre fuerte en Tías, busca otra marca que le aporte algo más que quebraderos de cabeza al tener que aguantar las simplezas de Armando, que llegó al partido de la mano del abogado Alejandro Díaz, al que sustituyó sin miramientos para garantizarse sueldo, en lugar de dimitir aceptando las responsabilidades de la dirección de una campaña, que según dicen sus propias víctimas internas, fue un desastre.

Nueva Canarias no tiene más proyecto en Lanzarote que diseñar una estrategia para convertir a Gladys Acuña en su líder en la isla. No hay más. Ni hay mimbres para más, en un centro izquierda donde conviven en Lanzarote PSOE, Podemos, Somos Lanzarote y  Alternativa Ciudadana y, en el mismitos centro, aunque escorado hacia la derecha, se planta también con inusitados bríos Ciudadanos.

En este maraña de partidos y siglas, solamente hay una salida y se llama Gladys Machín, populista ella, expilista, y con tanto recorrido en el centro derecha como dispuesta está en hacerlo en este espectro, sumando todo lo que puede. Retirada de la Alcaldía, a Gladys, si quiere seguir en política, y quiere seguir, a pesar de los dolores de cabeza ( y sentencia) que se ha llevado, no le queda otra que meterse en este juego. Porque tampoco quiere ir, de entrada y mientras no esté Oswaldo, su amigo del alma confesado en la Primera Comunión reciente, con el que ella comulga tan a gusto,  mejor colocado a Coalición Canaria.

 Entonces, la cosa esta clara: Nueva Canarias quiere a Gladys y Gladys quiere a Nueva Canarias. Boda política segura. Y es aquí, en estas esferas de estrategias, conchabos y listas electorales, donde parece que la foto filtrada al gran público insular no es nada inocente. Él calculó, como buen maquinador que es, el impacto que iba a tener y lo mucho que iba a ayudar a Gladys y lo poco que beneficiaba a los suyos (¿ O él no habla de los suyos sino de lo mío solamente?). Aunque, me da, que esa primera piedra solo la tiró para abrirle el camino a la segunda: su exigencia pública de ir en dos listas. En otra más, aparte de encabezar al Ayuntamiento. Como ya hizo en las pasadas elecciones en su partido "Marci Acuña, "el amigo del alma" de Pedro San Ginés, en el PSOE, Dolores Corujo "multicargos", en  Nueva Canarias, su propia amiga del alma "Gladys Acuña" y en el PP, su presidenta Astrid Pérez, aunque esta no llegara a ser alcaldesa.

En ese mundo oscuro, lleno de tácticas y estrategias, minado por los globos sonda y alentados por los que quieren ver más rota CC que a Oswaldo de presidente del Cabildo, se está moviendo el alcalde de Teguise en estos tiempos preelectorales. Y quizás, entre tanto alboroto, ambiciones políticas y actos de todo a 600, se le está olvidando cosas, tan simples pero a la vez tan determinantes, como aprobar los presupuestos municipales, norma fundamental para organizar debidamente los recursos y acciones del Ayuntamiento y prever las inversiones y servicios nuevos que demandan los vecinos. A ver si con tanto ruido y pompas viene Ciudadanos de Costa Teguise a La Villa a reducir la mayoría absoluta de la tanto presume el alcalde nacionalista a simple mayoría. Pero de eso, del gobierno local, ya hablaremos mañana.