El primer pleno

Menos de una hora, tardaron los consejeros del Cabildo de Lanzarote en arreglar sus cosillas económicas y garantizarse una cómoda vida durante estos cuatro años de mandato, si nadie lo remedia. El pleno iba, fundamentalmente, de sueldos, liberaciones, dietas, compatibilidades y esas cosas. De cuánto vamos a ganar por estar aquí estos cuatro años disfrutando de los que nos gusta y fardando con el cargo de consejero, sus viajes, sus comidas y el reparto de sus ingresos entre las partidas más insospechadas.

 Y el pleno, como no podía ser de otra manera, fue de guante blanco, donde el portavoz de CC, el expresidente Pedro San Ginés, perdió más tiempo en corregir a la presidenta Dolores Corujo  su falta de práctica dirigiendo la sesión que sacando sus uñas para atacar las subidas salariales y demás. La portavoz de Podemos, Nona Perera, estuvo dura en contra de la subida salarial del 5%  los consejeros y hasta el 6, 37%  la presidenta y vicepresidentes. En cambio, el portavoz del PP, Jacobo Medina, creo que ni abrió la boca en esa hora, y si lo hizo fue para bostezar porque no recuerdo haberlo oído. Nada. Pero votar, sí que votó con premura, que su sueldo es de los suculentos y no se puede uno despistar en estas cosas. Debe estar el  amigo Jacobo Medina asustado con tanto dinero junto. Él que venía de estar en la oposición en Arrecife y trabajando para sobrevivir como abogado, de golpe y porrazo se ve en el gobierno del Cabildo, de vicepresidente, y encima cobrando más de 4000 euros mensuales, hasta catorce pagas, que él creía que eso ya no existía.

La verdad es que todos deben estar muy contentos. Todos. Este pleno es como el sorteo de Navidad para los políticos del Cabildo, con la diferencia de que aquí ganan todos, que es el único sorteo donde la casa es la única que pierde, en este caso el Cabildo. Al que no le toca un sueldo entero le toca una liberación parcial. Y una liberación parcial del 98%, como la de Nona Perera, de parcial tiene lo mismo que yo de astronauta.  Como tampoco parecen muy parciales, a la hora de cobrar, claro, los 90% de Andrés Stinga Perdomo, Rosa Callero Cañada y Nerea Santana Alonso, que seguirán haciendo caja a toda velocidad en sus negocios y actividades profesionales mientras les caen 14 ingresos anuales en sus cuentas de unos 3000 euros cada uno. Bueno, bueno.

La verdad es que es todo un ejemplo de solidaridad consigo mismo de los consejeros y presidenta incluida, que perdió una oportunidad preciosa de mantenerse callada cuando intentó justificar la subida de su sueldo en un 6.37% y la de los consejeros en un 5% aduciendo que en otros cabildos cobraban más que aquí. Decían estos socialistas, a los que les gusta más el dinero público que a las cabras los tebetes, que la cosa era cuestión de prioridades, que los ingresos eran los mismos pero que se tenían que cambiar su destino en cuestión de prioridades. Ahora ya sabemos que su primera prioridad son ellos mismos.

  Yo no sé cómo van a convencer esta gente a los ricos para que actúen con transparencia en la redistribución de la riqueza. Que cedan parte de sus ingresos para que les llegue a los más desfavorecidos. Y no lo entiendo porque la enseñanza que se saca de plenos como el de ayer es que da lo mismo que sean nacionalistas, populares o socialistas que lo primero que hacen es coger de la caja común dinero para subirse su sueldos que podrían destinarse a subvenciones, becas o ayudas a esos miles de pobres que ellos mismos dicen, en campaña, que hay en la isla. Sinceramente, ¿la primera prioridad que tienen los lanzaroteños es que sus políticos se suban el 5 o el 6,37% sus sueldos? ¿No les parece raro que eso fuera lo primero que detectaron y que sólo tardaran una hora en solventarlo?

Hay que ser, además, insensible y torticera para decir que aunque se suben los sueldos y todos los consejeros del grupo de gobierno están liberados, se ha conseguido que bajara los gastos de la partida presupuestaria asignada en el capítulo uno al pago de políticos. Vergonzoso. Saben perfectamente que hay ocho sueldos menos porque cuatro eran portavoces de grupos que ya no tienen representación y los otros cuatro sus secretarias de grupo. Y es que dan por hecho que hay que gastar toda la partida, aunque haya cambiado de forma significativa. Se les olvidó a estos chicos y chicas que quieren acabar con la pobreza ( ¿o enriquecerse ellos?) que existen las modificaciones de crédito. Esto es, ese dinero que no se gasta en esa partida, se pudo haber enviado a la partida de becas, de emergencia social y cosas así tan mal vistas. No me digan que no han visto hacerlo, desviar dinero de cualquier partida para las de fiestas, protocolo, y esas cosas. Sinceramente, creen que somos tontos, y a veces, hasta yo estoy por pensar que lo somos.

Daba gusto ver al portavoz del PSOE, Marcos Bergaz, queriendo vender gato por liebre en sus muy bien hilvanadas intervenciones. Pero es una pena que quisiera esconder detrás del acto de aprobación de los salarios y organización del Cabildo, imprescindible desde el primer momento del mandato, la subida salarial del 5% y el 6,37 % de los consejeros, donde también se beneficia él. Da cierta desconfianza que quien apunta maneras de buen político esconda la verdad de forma tan evidente a los ciudadanos para hacer piña con sus queridos compañeros liberados. No era obligatoria, ni mucho menos necesaria, esa subida. Y lo dejó bastante claro Nona Perera, y lo sabe cualquiera, incluidos todos los consejeros con la presidenta a la cabeza. Ahora bien, si tiene uno la posibilidad de ponerse su propio sueldo con dinero ajeno, ¿para qué quedarse con una cantidad si se puede conseguir el 5 o el 6,37%  más de entrada?

Pues eso, que para los políticos lo único que cuenta es lo que se meten en la saca. Aunque sea de forma legal. Los pobres que esperen. Y el resto también. Este sorteo es sólo para ellos, los consejeros, y hay premios para todos. Sueldos, dietas, comisiones para los grupos políticos, liberaciones ad hoc. Una lotería. Solo faltaron los niños del San Ildefonso ( Y no me refiero aquí a los hijos del Aguilar, que esos tienen su propio sorteo).