¿MARCOS HERNÁNDEZ HABLANDO DE COBRAR? ¡QUÉ RARO!

El politiqueo no descansa ni en los peores momentos. Con una pandemia encima, que nos tiene a todos confinados en nuestras casas, algunos siguen con la misma matraca, como si la cosa no fuera con ellos. Es verdad que ellos  siguen cobrando lo mismo y fardando lo mismo pero deberían, por los menos, tener un poquito más de recato.

Y por ahí va la queja de un lector que nos llamó ayer muy enfadado. Y encima era para comentar una noticia de otro digital, en este caso de Crónicas de Lanzarote. El hombre, que encima es  compañero del parlamentario socialista Marcos Hernández, no dice que por qué no le preguntamos al mismísimo Marcos cuánto se lleva a su cuenta todos los meses, sin decir ni pío y con el mínimo esfuerzo, entre sueldo, dietas de desplazamiento y dietas por asistencia a comisiones parlamentarias. Me dice, y aquí no damos crédito, que a Marcos le conocen en el Parlamento como el “cazacomisiones”, allí donde no puede ir un parlamentario socialista se presenta el señor Hernández Guillén, como si fuera el parlamentario “de guardia”. “Y a comisión que voy, comisión que cobro”, rezume el hombre.     

Por lo visto, lo que sacó de sus casillas al compañero de Marcos fueron sus declaraciones en Crónicas de Lanzarote, donde, en un afán de desprestigiar la medida de bajarse el sueldo “su querido rival y vecino de Tinajo”, el alcalde, soltó, como si él fuera un hermanito de la caridad, que “No he oído hablar a Suso Machín del dinero que cobran mensualmente él y los concejales por combustible porque eso es un sueldo encubierto”. “¿Y lo suyo qué es, don Marcos Hernández, parlamentario regional del PSOE, acaso un sobresueldo por simpático?”, se preguntaba, dolido, su compañero. En fin, que aquí todos tienen perras que guardar y el pueblo preocupado por si come este mes y sin poder trabajar.