DE PARTIDO POLÍTICO, A BANDA; DE AFILIADOS A BANDIDAJE

El alcalde de Yaiza, Oscar Noda, con los concejales de Cultura, Daniel Medina, y de Deportes, Ángel Lago, en una reciente prueba deportiva en Playa Blanca. Ambos avalan su candidatura a la Presidencia de UPY.

Los gritos en una emisora de radio local del actual presidente de la PMH Pepe Torres, hace unos años, cuando era miembro de CC, y se saltaron los estatutos del partido para celebrar un congreso, retumban ahora en Yaiza.

Torres decía que un partido que no cumple sus propios estatutos es una banda. Lo decía porque se instala la ley del más fuerte y los afiliados no tienen dónde acogerse. Es la forma más antidemocrática de gestionar un grupo humano. Y precisamente ofende más cuando se da en el instrumento previsto para la participación electoral en un país democrático.

Eso parece que se le ha olvidado al alcalde de Yaiza y sus cómplices a la hora de afrontar la renovación de los órganos del partido Unidos Por Yaiza (UPY) con el afán de dejarlo doblegado ante las aspiraciones de un político que ha pasado de ser un un “hombre tranquilo” a convertirse en una persona que despierta intranquilidad entre los que le rodean por su desmedida ambición personal, que va hasta el punto de subrogarse todos los éxitos de UPY, que le puso de alcalde, sin ni siquiera ser elegido para ello, el pasado mandato.  No parece, sinceramente, la mejor manera de crear algo nuevo. Estos comportamientos se parecen mucho a la forma de actuar de otros que acabaron de aquella manera. Pasar de partido a banda, conlleva el riesgo de encontrarse, en lugar de con afiliados, con bandidajes políticos de dudosa calaña. Tiempo al tiempo.