“¿Por qué no cesa también al director nombrado por el PP con idéntico procedimiento?”
- Redaccion
CC-PNC-SB denuncia “el sectarismo laboral” del PSOE en la primera Institución. Pedro San Ginés, portavoz: “Si la presidenta del Cabildo cesa a un director insular propuesto por CC, amparándose exclusivamente en el procedimiento de dicho nombramiento, ¿por qué no cesa también a quien propuso el PP con idéntico procedimiento?”. Los nacionalistas denuncian “la falta de consideración hacia los trabajadores y los recursos humanos de la institución, por parte de una presidenta más preocupada en pagar favores políticos y arremeter contra CC que en sacar adelante los grandes proyectos que demandan Lanzarote y La Graciosa”
El Grupo político Nacionalista (CC-PNC-SB) en el Cabildo de Lanzarote denuncia “el sectarismo laboral” del Partido Socialista en la primera Institución, tras el cesar al director insular de Empleo, Jorge de la Guardia, a quien en principio el Partido Popular había mantenido en el cargo, según el gobierno porque “el procedimiento por el que fue nombrado no se ajusta a derecho, aunque la única razón es que fue designado por Coalición Canaria”.
Sin embargo, María Dolores Corujo sí que mantiene en su puesto al director insular de Infraestructuras y Planeamiento, Salvador Martínez, que fue nombrado por el Partido Popular “y que, curiosamente, fue designado con idéntico procedimiento”. (Se adjunta acuerdo del Consejo de Gobierno).
Según explica el portavoz de los nacionalistas, Pedro San Ginés, “los directores insulares pueden nombrarse con un proceso de libre concurrencia o de libre designación, porque entendemos que así lo ampara la ley y así lo ha hecho por ejemplo con todos los directores insulares el Cabildo de Tenerife presidido también por el PSOE. Aunque aún no sabemos cuál va a ser el procedimiento a seguir por el actual gobierno en el Cabildo de Lanzarote, lo cierto es que a unos los mantiene en el cargo y a otros los cesa aduciendo razones que acreditan el distinto rasero de Mª Dolores Corujo”.
Lo que ha ocurrido en este caso es que, en su momento, el representante entonces de Ciudadanos en la primera Institución, Benjamín Perdomo, sólo denunció el nombramiento del director insular de Coalición Canaria y se “olvidó” de denunciar al del PP con quien aspiraba censurar a San Ginés, a pesar de que, tal y como ya se ha dicho, fueron nombrados con idéntico procedimiento.
“Cuando hubo una sentencia quitando la razón al cabildo, la presidenta decidió allanarse y retirar el recurso que éste había presentado. Es decir, en lugar de defender al Cabildo en el caso de Jorge de la Guardia, lo que hizo fue allanarse para decir que habíamos perdido en los tribunales”, apunta San Ginés, quien añade que en este caso “sólo podíamos perder, precisamente porque Corujo se allanó y no por otra razón”.
“Sin embargo, como todas las decisiones tomadas desde una Presidencia dirigida por una fijación absoluta a todo lo que suene a Coalición Canaria, esta decisión de la presidenta, también está llena de contradicciones”, resalta CC.
“Si considera que tenía razón la demanda y por eso se allana, ¿por qué no cesa también al director nombrado por el PP con idéntico procedimiento?”, se preguntan los nacionalistas, aunque nada tienen en contra del desempeño de Salvador Martínez.
“Cuando se es el máximo o la máxima responsable de una institución u organización política se debe actuar con respeto, responsabilidad y aparcar en la puerta de la institución sus fobias y su filiación política”, ha declarado el portavoz del Grupo Nacionalista.
Una decisión que tan sólo corrobora, según los nacionalistas, “la falta de sensibilidad y de consideración hacia los trabajadores y los recursos humanos de la institución por parte de una presidenta que ni siquiera ha tenido el decoro de comunicar a los trabajadores sus ceses, y nos estamos refiriendo, además, al resto de directores insulares, consejero delegado de la EPEL-CACT etc, quienes se enteraron por la prensa de sus ceses”.
“Entendemos que es potestad de la presidenta realizar los cambios que se consideren oportunos; pero con un mínimo de respeto y coherencia política”, concluye CC.