ARRECIFE NECESITA UN SERVICIO DE GUAGUAS EFICAZ, NO MÁS PELÍCULAS NI CUENTOS

Ayer, la concejala Ángela Hernández trataba de explicar en el informativo más madrugador de Lanzarote, El Pejeverde, de O2 Radio, qué se estaba haciendo para mejorar el caótico servicio de transporte público urbano de Arrecife.

La concejala habló de la necesidad de contratar más chóferes y alguna tontería más. Se le olvidó decir que el servicio de reparación de guaguas, adjudicado hace poco, presenta serias deficiencias y que tardan más las guaguas en salir del taller que en volver a entrar. Y desastres parecidos.

Arrecife ya necesita un transporte público urbano eficaz, que permita movilidad en la capital de la isla sin necesidad de arrastrar cada ciudadano un coche. Hay que apostar por una movilidad lo menos contaminante. Y en ese planteamiento, lo más necesario e inmediato es poner al frente de la movilidad de Arrecife a alguien con dos dedos de frente. Que no a un calvo, aunque la cosa no sea cuestión de seguir poniendo los pelos de punta a usuarios y trabajadores con las ocurrencias del jefe de turno, sino de neuronas.

En Arrecife hay que hacer un plan urgente de movilidad. Hay que hacer un plan, y hay que hacerlo y aplicarlo de forma urgente, no contratar a un ingeniero, gastarnos un pastón y después dejar el plan en la gaveta y seguimos con las guagüitas viejas, a deshora, despistando a los usuarios.

Que se haga un plan que facilite la comunicación de los barrios con el centro y los principales servicios de la ciudad en guagua y que se adjudique en un concurso abierto, y no en un regalo a la empresa de siempre, de la forma que sean estos los que más le saquen en detrimento de los usuarios. Da igual que sea un servicio público que un servicio externalizado, lo que importa ya es que funcione. Que se deje de tirar dinero en guaguas viejas, malos servicios, bajas camufladas y trabajadores de quita y pon y se empiece a ver un servicio eficiente de guaguas en Arrecife que permita que estudiantes, jubilados, trabajadores y trabajadoras puedan desplazarse por la ciudad, en tiempos razonables, y sin necesidad de llevar un bocadillo para aguantar la letanía que pasan hoy.

Ya es hora de que alguien ponga el buen funcionamiento de los servicios públicos por delante de los cuentos y las películas de ediles y edilas con muy buenas intenciones pero sin ningún conocimiento real de lo que hay ya ni de lo que tenemos que hacer. Es cuestión de gestión pública, no de tanto chisme y compadreo estéril. Qu está bien gastarse cerca de 3 millones de euros en Arrecife para llenar la ciudad de semáforos, ya veremos después como los mantenemos, pero mejor sería ver carriles de guaguas, y más patinetas, bicicletas y guaguas eléctricas circulando por Arrecife y muchísimos menos coches. ¿Pero todavía no entienden de qué va la cosa?