EL OBISPO, LA VIRGEN DE LOS DOLORES Y LA DIRECTORA DE LA RED TRIBUTARIA
- J.B.C.
Hay piezas que hay que ir encajando en la política insular para ir entendiendo las cosas que se van produciendo. Algunos dicen que ya empiezan a entender aquel sermón del Obispo en las fiestas de Los Dolores criminalizando la política migratoria del PSOE en la línea del Gobierno de Canarias, flanqueado por el presidente del Cabildo y el alcalde de Tinajo, ambos de Coalición Canaria.
Algunos dicen que esas palabras, llenas de fervor y arrogancia, han ayudado un poquito para que Cáritas consiga que el Cabildo ponga 8 millones de dinero público en aquel proyecto que tenía varado en Altavista desde hace unos cuantos lustros. Tanto sonó a milagro que hay quien también relaciona la próxima bajada de la Virgen de Los Dolores a Arrecife con esas cuitas. Y es que en estos tiempos, donde la mayor parte de la población insular comparte eso de la libertad de confesión y el estado aconfesional, no parece muy acertado que nos sumerjamos en aquellos tiempos de la España rancia, franquista y obligatoriamente católica para convertir una caminata con virgen incluida de Mancha Blanca a Arrecife en objetivo de primer orden político.
Como tampoco cuadra muy bien el secretismo con el que se ha llevado la salida de la directora y alma mater de la Red Tributaria Insular, Pilar Zurita, de este ente. La cosa fue tan dura que la técnica y experta en la materia, que puso en funcionamiento la Red y la ha llevado con solvencia, ha abandonado el Cabildo para irse a Madrid a seguir con sus funciones de funcionaria de habilitación nacional. Nos están contando muchas cosas de lo que pudo pasar con esta funcionaria ejemplar. Y el grupo de gobierno, con la consejera de Hacienda al frente, no queda muy bien parada. Pero antes de contar nada, habrá que confirmarlo todo. En eso estamos ya.