¿Solo el turista tiene que ser ético y responsable?
- MANUEL GARCÍA DÉNIZ
En Lanzarote, hay algo más escaso que el agua: la vergüenza. Especialmente, entre los políticos. Todos los días nos dan muestras inequívocas de que nos consideran a todos tontos de capirote, de que creen que nos pueden decir lo que les dé la gana, sin ruborizarse ni nada, aunque lo que salga por sus boquitas de amamantados hasta la jubilación sea una clara contradicción de lo que hacen diariamente.
Ayer, el presidente del Cabildo, el inefable Oswaldo Betancort, presentaba lo que llama “la nueva Estrategia de Concienciación por un Turismo Ético y Responsable” con la que pretende que los turistas no agredan los espacios protegidos de esta isla nuestra. La idea no es que sea mala, que está bien que los turistas sean éticos y responsables. Lo realmente sorprendente es que quienes exigen ética y responsabilidad a los turistas, a los visitantes ocasionales de la isla, no han sido capaces de actuar con esa misma responsabilidad y ética en el ejercicio político en la isla.
Yo no sé si los habitantes “tontos de capirote” de esta isla nuestra nos creemos realmente que el problema que tenemos es que los turistas no son éticos ni responsables. Que lo peor que nos ha ocurrido en esta isla es que, de los casi tres millones de turistas que nos meten aquí políticos y empresarios conchabados y egoístas cada año, en este territorio frágil y bellísimo, unos cuantos de ellos hayan decidido aprovecharse de la deficiente gestión de esos espacios para hacer alguna ruindad o gamberrada. Que no es que esos turistas entre chapuzón y paseo, construyan hoteles ilegales en doquier, cuartos de apero con tamaño de mansión en los mismísimos espacios protegidos, despilfarren el dinero público en autopromocionarse políticamente o en comilonas con amigos y allegados.
Esos turistas no son los responsables de que nuestras carreteras estén llenas de coches, de que no haya un transporte público eficaz, de que seamos los últimos en la cola de adecuación de nuestra economía a las nuevas exigencias medioambientales. Precisamente, los responsables de todo eso y más, son los mismos que quieren culpar a los turistas de todos nuestros males, aunque, a la vez, nos piden que no digamos nada porque se trata de nuestra gallina de los huevos de oro. En realidad, por el cloquido, por ese cacareo de gallina clueca por el poder y la ostentación, sabemos que es la manera de siempre de nuestros políticos de esconder la realidad para alumbrarse un mejor futuro propio. Siempre basado en lo mismo: en la mentira, la propaganda y en confundir los efectos del problema con las causas que lo producen.
Si vamos al decálogo que recoge la estrategia ya es para mear y no echar gota (casi lo mismo que le pasa a las tuberías del Consorcio del Agua en muchos pueblos lanzaroteños cada día). Sin arrugarse ni nada le recomiendan al turista: “Ahorra agua: Se trata del bien más preciado en una isla castigada por la sed, que ha exhibido una tenacidad heroica gestionando las escasas precipitaciones y la humedad ambiental”. ¡Qué ironía! Los mismos que pierden más del 60% del agua producida en la isla en las tuberías, en la mera distribución de la misma (¡bonita tenacidad heroica!), quieren hacerle ver a los turistas que ellos tienen que ducharse a la prisa para seguir permitiendo estos despilfarros a los que se han llegado gracias a otros despilfarros de los que ellos, los políticos, han sido los únicos beneficiados. Esta no es “una isla castigada por la sed”, impresentables del demonio. Esta es una isla castigada por el latrocinio y la avaricia de cuatro y pico mangantes que siempre han puesto el negocio y conchabo por delante del bienestar de los habitantes y sus visitantes. Y de unos mentirosos redomados que engañan a su gente con unos aires de superioridad que solo pueden soportar tontos de capirote como nosotros.
Si ahora va a ser que los turistas, entre chapuzón y paseo, se dedican a hacer gofio las tuberías aquí y allí para que se pierdan casi dos tercios del agua producida. Si ahora va a ser que los turistas son los que se reúnen con los representantes de Canal Gestión para estar mareando la perdiz, y lo que te rondaré morena y comisión, y que todo siga como está mientras damos la apariencia de que todo va a cambiar. Si ahora va ser que fueron los turistas los que llevaron a la quiebra a Inalsa y quebraron el sistema público de producción de agua. Si ahora va a ser que somos tontos de capirote y les seguimos haciendo caso a los que nos han engañado siempre. Y les quieren hablar estos de “ética y responsabilidad” a los turistas.
Comentarios
Por la perspicacia de algún empresario que se los presta por interés.
Pero no pasa nada ellos, se siguen enriqueciendo con mordidas al más ESTILO de Cataluña.
Pero sigue sin pasar nada, porque traemos un HELICÓPTERO para emplear algún amigo piloto.
O llenamos el RISCO de monolitos (por cierto un espacio protegido) porque esa es la solución.
Simplemente!!!! SINVERGÜENZAS DE PACOTILLA