“LA NOCHE” CONFUNDE A BENJAMIN Y A TODO EL CABILDO
- JUAN TORO CABEZA DE VACA
Lo más apropiado para dinamizar la Casa Museo El Campesino. ¿Seguro? “Acróbatas, bailarines y bailarinas, performances variadas, contorsionistas y tecnología son algunos de los ingredientes de "La Noche", un evento pensado por y para la diversión de residentes y visitantes en la que el baile se alza como símbolo de libertad, igualdad, diversidad y unidad”. "Es una forma distinta de descubrir y disfrutar del emblemático espacio a través de propuestas originales, divertidas e innovadoras que se fusionan para sorprender a quienes decidan pasar La Noche con los Centros Turísticos" ha avanzado el consejero delegado de la Entidad, Benjamín Perdomo.
¿Era eso exactamente en lo que estaba pensando César Manrique cuando ideó la Casa Museo El Campesino? ¿Era en acróbatas, bailarines y bailarinas, performances variadas, contorsionistas y tecnología en lo que estaba pensando nuestro artista universal para dinamizar este espacio? ¿Realmente era tan futurista y traidor de su propia idea de conservar la esencia de Lanzarote? Yo no me lo creo. Como tampoco me creo que en este caso se haya pensado en qué hubiera pensado César. Es que estoy hasta por pensar que aquí se utiliza a César cuando él piensa como quieren sus “queridos defensores” que piense, pero se le olvida sin ningún rubor cuando sus exigencias pueden llegar a ser incómodos corsés para los paladines de la nada. Sí, de la nada, aunque la nada pueda ser muy manriqueña.
Este Cabildo se ha empeñado en hacer en los Centros Turísticos todo lo que se les ocurre, gastándose la pasta gansa que entra por venta de entradas en gustar a propios y extraños. Se olvidan que los CACT tienen una capacidad de carga que hay que vigilar, que son muy sensibles, y que no tiene sentido llevar allí espectáculos que se pueden hacer en cualquier otro lugar, ya sea un teatro, un terrero o un pabellón. Pero es que se creen que están más cerca de César si están todo el día metidos en su obra espacial, aunque sea perjudicándola. ¡Demencial!
Cuando César concibió el Monumento al Campesino, quería que fuera precisamente eso, un homenaje al hombre y a la mujer del campo y a ese espacio físico creado con sus manos, al igual que él interactuó con la naturaleza para que brotara su obra. Y estos seguidores suyos se empeñan en hacer todo lo contrario. O todo menos eso. Es una pena como se han ido cargando el contenido del Monumento al Campesino, dejando ya solo el continente, su parte exterior y arquitectónica como única referencia al propósito del genio.
¿No tendría más sentido que hubiera fiestas canarias, exhibiciones del mundo agrícola pasado y presente, gastronomía tradicional, banco de semillas históricas. ¿No somos capaces de crear algo atractivo, duradero, con nuestras cosas de siempre? Tenemos siempre que poner en valor lo del otro, tenemos siempre que traer hacia nosotros lo de los demás en lugar de llevar a ellos lo nuestro? No sé lo que hubiera dicho César, pero me extraña mucho que si lo que hubiera querido hacer era un centro para “acróbatas, bailarines y bailarinas, performances variadas, contorsionistas y tecnología” le hubiese puesto el nombre de Monumento al Campesino. ¿O era tan enrevesado e irrespetuoso con nuestra gente del campo?