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PUTAS, COCAÍNA, CORRUPCIÓN, LA IMAGEN MÁS CUTRE DEL PSOE

Fotografía del digital El PAIS

 

El caso “Mediador” está poniendo al PSOE ante sus propios fantasmas del pasado en plena campaña electoral.

Con lo que ya se sabe, al margen de argumentar debidamente la colección de delitos que se le imputan a los cargos socialistas investigados, todos los vinculados a la corrupción, la imagen del partido socialista se destroza. Que cargos de la talla de un director general del Gobierno de Canarias y de todo un diputado nacional socialista, miembro de la cámara que representa la soberanía nacional, presuntamente se alíen con un general retirado de la Guardia Civil para no solo delinquir sino también para ponerse hasta las trancas de cocaína, consumo prohibido por sus señorías a los españolitos de a pie, y que se vayan de putas al más puro estilo Torrente Uno, Dos y Tres, avergüenzan no solo a sus amigos y compañeros de partido sino a todos los que pensábamos que estábamos construyendo un mundo mejor, con otros valores.

 Pero parece que la prostitución siempre sale a reducir cuando un socialista se corrompe. Pasó en Andalucía, pasó con un alto cargo del partido en Madrid y, ahora, nos muestra lo “mejor” de la huerta roja del PSOE canario. En fin, que me imagino las caras de sus compañeras de partido, que se matan por aprobar leyes contra la trata de blancas, del “Sí es Sí” y otras parecidas y se encuentran al lado de su escaño, sentado y sonriente, la peor versión de los “putañeros” de antaño. ¡Lo que tiene que aguantar una afiliada de izquierdas!

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