¿CÓMO SE LE PUEDE EXPLICAR QUE 40 AÑOS NO SON NADA SI EN SEIS MESES HA CONSEGUIDO UN MONTÓN?
- J.B.C.
El portavoz de CC en el Ayuntamiento de Yaiza, Emilio Machín, desvelaba en una emisora de radio que sus Reyes se le retrasarían al mes de abril. Y no se trataba de que los camellos que le traían los regalos al hijo del que da nombre al terrero de Uga, miembro de familia con tradición en la cabaña camellar lanzaroteña, fueran más lentos que los otros, sino que apunta sus sueños y peticiones al hecho de que va a ser padre, por primera vez, de un niño en esas fechas. No sabemos si se llamará Emilio, como su padre y abuelo, pero es comprensible que la llegada de un hijo se convierta en el mejor regalo de Reyes de cualquier persona.
Pero, claro, hay personas que quieren un hijo de regalo de Reyes y lo tienen el seis de enero. Como es el caso de los padres del alcalde de Arrecife, Yonathan de León, que les pidieron a los Reyes un niño para 1984 y se lo entregaron en tiempo y forma el mismísimo día 6 de enero. Por eso, hemos visto en todas las redes al alcalde apagando vela, que no arriando, en un roscón de Reyes en lugar de en una tarta. Lo difícil es consolar a este hombre con aquello de que cuarenta años no son nada, “y ya viste que tu abuelo hasta los 106 fue persona”, cuando en apenas seis meses pasó de haber sido conocido como gerente de una carnicería de Titerroy a convertirse en el alcalde más popular y con más proyección de la capital lanzaroteña, sin haberse sido siquiera candidato ni número dos. Aunque todavía le falta mucho para que la mayoría de los arrecifeños piensen que ese regalo de Reyes de 1984 era para toda la capital de Lanzarote y no solo para sus familiares.
Aunque tampoco vayan a creerse que es el único político lanzaroteño que llegó a la vida por Reyes y que hay que ser del PP para semejante coincidencia. Pues no, porque exactamente seis años antes, en 1978, los padres del socialista Marcos Bergaz, concejal de Teguise y parlamentario, también recibieron el regalito de marras. Así que felicidades atrasadas a los dos y los mejores deseos para Emilio y su pareja.