¿ES MAYOR LA INSEGURIDAD EN PLAYA HONDA QUE EN ARRECIFE, PLAYA BLANCA, PUERTO DEL CARMEN O COSTA TEGUISE?
- J.B.C.
El portavoz de CC en San Bartolomé, el veterano edil nacionalista David Rocío, parece que está más por la labor de seguirle el juego al presidente del Cabildo en su ninguneo al municipio, que para eso es el que le paga el sueldo sin saberse bien por qué y para qué, que en hacer una oposición responsable como corresponde a alguien que fue miembro del gobierno en pacto con el PSOE en el mandato 2015-2019. David Rocío conoce perfectamente la realidad del municipio, y tiempo ha tenido para ello, que ni él se acuerda ya cuándo entró en el Ayuntamiento.
Y, por eso, sorprende que esté apostando por escandalizar, injustificadamente, a la población con cosas que él sabe que no son ciertas. Y el hecho de estar poniendo a San Bartolomé, su municipio, como si fuera un reducto de delincuentes donde apenas se puede salir a la calle, no ayuda a tomársele en serio. En todo San Bartolomé, y especialmente en Playa Honda, se respira una tranquilidad, como en el resto de la isla de Lanzarote, que ya quisieran para sí el resto de los lugares del mundo. En cambio, si se oye a David parece que estamos en El Bronx en sus peores años.
Si Rocío lo que quiere es criticar la situación que se mantiene en la Policía Local, donde, al parecer, hay un enfrentamiento con la corporación municipal por cuestiones laborales, está en todo su derecho. Y hasta parece plausible, que para eso es la oposición. Pero querer convertir un conflicto laboral, si lo hubiera, en una situación alarmante de seguridad es una temeridad. Y lo decimos quienes paseamos todos los días por las calles de Playa Honda y lo único que vemos es gente de todas las edades moviéndose de un lado para otro con absoluta normalidad. Nada distinto a lo que pasa en Puerto del Carmen, Arrecife, Costa Teguise, Haría o donde se quiera en esta isla, donde los incidentes son escasos y de baja intensidad.
Si no se puede actuar como pirómano cuando se quiere ser bombero, parece lógico que tampoco se debe actuar como un absoluto irresponsable cuando lo que se quiere es aspirar, precisamente, a ser el responsable máximo del municipio. Se puede entender el agobio de Rocío, ante la presión de los suyos, que quieren que haga el trabajo sucio en el terreno del rival político mejor valorado de la isla, pero él tiene tablas suficientes para saber diferenciar lo bueno de lo indeseable.