¿GINÉS GONZÁLEZ NO SABÍA LO QUE ERA LA EXTREMA DERECHA O NO SABÍA LO BUENO QUE ES GOBERNAR?

El concejal de VOX en Teguise ya no es el concejal de VOX en Teguise. Ginés González, que así se llama el ahora edil tránsfuga,  ha decidido abandonar su organización política, con la que consiguió el acta de concejal, porque dice que no comparte la decisión de VOX de dejar sola a Canarias frente a la crisis de inmigración. Y lo dice como quien estuviera convencido de que todos no sepamos ya que su voluntad no es otra que mantenerse en el gobierno de Teguise, donde su pertenencia a VOX causa cierto malestar en las organizaciones políticas con las que comparte gobierno.

Ginés González se va de VOX porque quiere garantizar que se queda en el grupo de gobierno. Lo único que explica su salto “sin red” es que realmente tiene red, la que le proporciona el pacto PP-CC para seguir en el gobierno. Es sorprendente que un militante de VOX diga, ahora, que no conocía la política de inmigración de su partido o que se extrañe de que ponga por delante su ideología de extrema derecha a los intereses de Canarias. ¿Pero se puede esperar otra cosa de un partido que tiene de ideología tintes racistas insostenibles? ¿Realmente los intereses de Canarias son más importantes que salvar vidas humanas?

Ginés González ha hecho una pirueta de muy mal gusto para desvincularse de VOX y estrechar vínculos con los socios de gobierno. Si realmente le molestara la política de su partido, si realmente no creyera en la sarta de peligrosas sandeces que pregona VOX, lo que tendría que haber hecho es pedir disculpas por representarlas e irse a casa. Ese cargo lo consiguió con los votos de los que creen esas proclamas de Vox y, si él no las cree ya, lo honesto es irse a casa. Si no lo hace así, solo quedan dos formas de interpretarlos: una, que uso a VOX como trampolín para llegar al cargo exclusivamente. Dos, que, además de ser de extrema derecha, le importan un bledo los electores y la ética. En ambos casos, está demostrando menos coherencia que los dirigentes de VOX: de quienes esperamos locuras, que las hagan no es una sorpresa. Lo realmente sorprendente es que alguien que pregona unas ideas, las cambie cuando ve en riesgo su cargo. Y eso es lo que parece que ha pasado con Ginés. Y es que ir de ingenuo no siempre es una genialidad.