La Mesa Ciudadana del Agua de Lanzarote denuncia los costes económicos y medioambientales de las pérdidas de agua en la isla

“Los datos publicados por el centro de datos del Cabildo de Lanzarote, ofrecen una situación escalofriante”

Mesa Ciudadana del Agua de Lanzarote considera que la gestión del agua de Lanzarote es “uno de los mayores problemas y retos” que afronta la isla en la actualidad. Resalta que los datos publicados por el centro de datos del Cabildo de Lanzarote, “ofrecen una situación escalofriante”. En la actualidad se producen al año aproximadamente unos 30 millones de metros cúbicos, de los cuales sólo se consumen poco más de 13 millones.

“De los 13 millones de agua consumida, casi 6 millones se realizan en zonas turísticas, cantidad muy similar a la de las zonas residenciales (45% aproximadamente). El agua agrícola por su parte, apenas llega al 6% con un consumo anual con 800 mil metros cúbicos por año. Así mismo, entre los meses de mayo y septiembre de este año (153 días), hubo 97 días de cortes de agua en la isla, habiendo localidades con más días de corte que días con suministro de agua”, menciona la Mesa Ciudadana del Agua.

Analizando las localidades afectadas, se aprecia como todos los cortes fueron realizados en zonas rurales y ninguno en zonas turísticas. A pesar de estos datos alarmantes, Canal Gestión Lanzarote, ha emitido comunicados de prensa este año en donde pone en valor como en el 2023 la producción de agua subió un poco más del 4%. “Pero ¿realmente es para estar orgullosos de la gestión realizada?”, cuestiona.

“Analizando estos datos con un poco más de detenimiento sacamos las siguientes conclusiones: Todos los años Lanzarote, una isla con una falta de agua acuciante, tira a la basura casi unos 17 millones de metros cúbicos, cantidad de agua que produce pero que no aprovecha. Si tenemos en cuenta que el precio medio del agua ronda los 1,75€ el metro cúbico, estamos hablando que esta pérdida de agua supone en cifras económicas, más de 28 millones de euros al año que se dejan de recaudar. A esta cifra habría que sumarle el coste de la producción. Sabiendo que el consumo de energía utilizada en el total de la desalinización es de unos 92 millones de KWH aproximadamente, y que de los cuales unos 50 millones de KWH serían los necesarios para producir esos 17 millones de metros cúbicos de agua que no se utiliza, a un precio medio de 0,11€ el KWH, las pérdidas anuales serían de más de 5 millones de euros al año”.

“Pero las pérdidas de esta pésima gestión no son sólo económicas. Si nos paramos a analizar el impacto medioambiental los datos no son mejores. La desalinización del total del agua en la isla de Lanzarote supone casi 40 millones de KG CO2. Teniendo en cuenta que de estas cifras sólo el 44% se aprovecha, llegamos a la conclusión que esta Reserva de la Biosfera donde vivimos, anualmente libera a la atmósfera de forma injustificada debido a la pésima gestión, unos 21 millones de kg de CO2, a lo que le habría que sumar el impacto negativo en los lechos marinos ya no sólo de los vertidos incontrolados de aguas fecales que se están realizando, sino también de la salmuera que se genera en el proceso de desalinización”, valoran desde la Mesa Ciudadana del Agua de Lanzarote.

“En conclusión, la actual gestión privada del agua en la isla de Lanzarote, está suponiendo la pérdida anual (entre lo que se invierte sin retorno y lo que no se recauda) de más de 30 millones de euros año y la liberación de forma irresponsable de más de 21 millones de KG de CO2 a la atmosfera además de numerosos vertidos incontrolados a nuestras costas. Todo ello, para sufrir permanentemente cortes de agua que son selectivos y que siempre afectan a los mismos: a las zonas rurales, y mientras tanto el Cabildo ni está ni se le espera. La política, a pesar de que vaya enmascarada de bonitos y patrióticos relatos, se materializa en la toma de decisiones, y en este asunto es claro. A pesar de los numerosos discursos de apoyo al sector primario, de las grandes ferias gastronómicas que se realizan para supuestamente visibilizar el producto local, a pesar de llenar los aeropuertos y ferias internacionales de turismo con imágenes de La Geria, lo cierto es que la actual clase política con su toma de decisiones lo que está diciendo, entre otras cosas, es que prefiere ver piscinas llenas a campos sembrados y cultivados; mientras la rueda del turismo siga girando, nuestra clase dirigente no parece inquietarse”, denuncia.

Por todo ello, la Mesa Ciudadana del Agua de Lanzarote, entiende que “el actual modelo de gestión privada del agua, en manos de Canal Gestión, no se ajusta a las necesidades ni de la población de esta isla ni tampoco a las directrices sobre el cambio climático. Entendemos que el Cabildo de Lanzarote debería de exigir al menos y como primera medida inmediata, que Canal Gestión realizará una planificación de los cortes de agua, en donde los afectados no siempre fueran las zonas rurales, sino que dichos cortes se repartieran de forma proporcional y equilibrada para no dejar a nuestro campo sin agua en los meses que más lo necesita”.

Así mismo, “ante la ineficiencia de la gestión privada y la incapacidad mostrada tanto por el Cabildo de Lanzarote como por el Consorcio, se entiende necesario abrir un proceso abierto de reflexión con todos los agentes implicados, para abordar un cambio de rumbo en donde la gestión del agua se encuentre bajo un control público y sometido a una auditoría anual, no sólo de niveles de eficiencia sino también sobre su impacto medioambiental. Lanzarote y su campo necesitan agua y ya no se puede esperar más”, concluye la Mesa Ciudadana del Agua de Lanzarote.