La toma del Ayuntamiento
- MANUEL GARCÍA DÉNIZ
José Juan Cruz, con los dos exalcaldes de Tías Juan Calero (1979-1983) y Pancho Hernández(2011-2019)
Nos esperan batallas electorales reñidas (XXVIII)
Desde ayer, ya sabemos el día que los consejeros y el presidente electos del Cabildo de Lanzarote tomarán posesión de sus cargos. Costó que la presidenta en funciones, la socialista María Dolores Corujo, diera el paso de comunicar a los lanzaroteños y a los interesados el día y hora exactos del acto. Será el próximo lunes, día 26 de junio, a las 18:00 horas, un día antes de que se agotara el plazo, un día antes de que los 70 parlamentarios de Canarias, incluida la propia Dolores Corujo, tomen posesión como diputados. Lo hará por la tarde como consejera, por segundo mandato, y al día siguiente, por la mañana, como parlamentaria, por tercera legislatura. Aunque será un estar y no estar porque tendrá que abandonar el Parlamento de Canarias cuando tome posesión de diputada del Congreso de los Diputados español, al ser incompatible formar parte de dos cámaras legislativas al mismo tiempo. Ya les hablaré de todas esas “tomas y diretes” cuando llegue el momento, pero hoy quiero divagar un poco sobre lo que ocurrió el sábado en los siete ayuntamientos.
Ya tenemos las corporaciones municipales armadas. Sus 127 concejales y concejalas en sus puestos, los 7 alcaldes en los suyos y todo preparado para ir repartiendo áreas y sueldos a diestro y siniestro. De los 127, hay 61 que son personas que no estaban en el mandato pasado. Por el momento, sabemos que hay 77 hombres y 50 mujeres de ediles, con más de un tercio más de hombres que mujeres, 27 más en concreto, y la diferencia se irá acrecentando más todavía si abandona Astrid Pérez el ayuntamiento y entra Óscar David López, el siguiente de la lista, a sustituirla.
Al frente de las alcaldías, las mujeres celebran haber puesto una pica en Flandes, o sea, una mujer, Olivia Duque, en la Alcaldía de Teguise por primera vez en la historia, pero todo apunta a que será la única de todo el panorama municipal lanzaroteño desde que Astrid Pérez abandone la capital y la sustituya el hombre Yonatan de León.
En cambio, Tías y Teguise sigue sin conocer un gobierno municipal presidido por una mujer, ni por elección ni por equivocación. Nada. Tías ha tenido cuatro alcaldes en cuarenta y cuatros años de periodo democrático municipal, cuatro hombres, un centrista, Juan Calero (1979-1983); dos socialistas: Florencio Suárez (1983-1995) y José Juan Cruz Saavedra (1995-2011; 2019- ) y un popular, Pancho Hernández (2011-2019). Los principales partidos no quieren saber nada de mujeres candidatas. Ni el PSOE ni el PP en Tías apuestan por mujeres y prefieren repetir una y otra vez en los mismos. En Tinajo, en cambio, el PSOE sí pone a una mujer de candidata, Begoña Hernández, pero aquí ganan y ganan y vuelven a ganar los nacionalistas nada más. O si se quiere ser más concreto, aquí solo gana Jesús Machín, que lleva seis mandatos seguidos ganados por mayoría absoluta y, lejos de desinflarse, saca más concejales en estas elecciones últimas que en las anteriores. Todo un ejemplo de superación personal. Pero así no hay mujer que presida la corporación.
En general, las corporaciones mantienen una línea continuista. En determinados municipios, con un refuerzo importante de esas líneas. Es el caso de Tinajo, pero también de San Bartolomé que amplía su mayoría absoluta, de Yaiza, que los de UPY no solo continúan en el Ayuntamiento sino que lo hacen con mayoría absoluta. También en Tías se apuesta por una política continuista, con el veinte años alcalde, Pepe Juan Cruz, como líder, al igual que en el pasado donde también contó con el apoyo del único concejal de Podemos en Lanzarote, que ha sido reelegido en Tías, Nicolás Saavedra. A Pepe Juan, el alcalde de los actuales que primero tocó alcaldía (1995), se le notaba especialmente emocionado con los cuatro años extras que le han dado las urnas. Ha gobernado de todas las maneras posibles: con una mayoría absoluta justita, con una mayoría absoluta de récord, con una mayoría absoluta de menos récord, con mayoría simple y pactos e, incluso, en los últimos cuatros años habiendo perdido las elecciones y por mor de los “pactos entre perdedores”.
A medida que subimos hacia el norte de la isla, se notaba más la brisita del cambio. En Arrecife, preside el PP pero ganó las elecciones el PSOE con unos resultados que no habían tenido en Arrecife desde los tiempos en los que José María Espino y Andrés Fuentes lideraban el puño y la rosa en la capital. En Teguise, no solo tienen alcaldesa por primera vez, sino que, además, el PSOE volvió a ganar unas elecciones cuarenta años después de que las ganara por mayoría absoluta y Dimas Martín se las birlara en el acto de toma de posesión, delante de los ojitos vidriosos del concejal más joven de la mesa de edad, Sergio Machín de León. Ganó el PSOE como nunca pero gobierna como siempre CC. Aunque Olivia Duque debe saber gestionar el tremendo palo electoral que se ha llevado. Ha perdido cuatro concejales, tendrá que empezar a gobernar casi desde cero, con un pacto con el PP y con la mirada asustadiza, tímida, de Ginés González en el cuello, un concejal que, a pesar de entrar en el Ayuntamiento en la lista de la extrema derecha, les ha dado a todos muestras de moderación e ingenio que se echan en falta en otros y otras representantes con más rodaje y de partidos más centrados.
En Haría, se ha vivido una experiencia conocida, que se ha escenificado de manera distinta. El hecho de que el socialista Alfredo Villalba sea alcalde en minoría demuestra que ni unos ni otros fueron capaces de crear una mayoría estable. Pero todo apunta a que Chaxi Niz ha ido cogiendo más tablas de las que se les presuponía. La mujer no se presentó como candidata para ser alcalde en el pleno, aunque fuera para votarse a sí misma, y sabiendo que un solo voto la separó de Alfredo en las elecciones. Que si Chaxi hubiese tenido un voto más en las elecciones, tuvo 707 frente a los 708 de Alfredo, hubiese igualado en votos al PSOE de Alfredo y la alcaldía se hubiera decidido en ese mismo pleno con una moneda. A cara o cruz.
Pero, para cara, la de mi amigo Pepe Torres Stinga, que no es capaz de reconocer una derrota ni que se la repitan mil veces. Su candidatura, la de PMH, fue la menos votada de los tres partidos mayores, fue la que menos concejales sacó y encima sacó menos votos que en las pasadas elecciones, a pesar de llevar un año gobernando en solitario, y quería que Evelia García fuera elegida alcaldesa, con los votos de los concejales de uno de los dos grupos que le superaron en todo. No es inaudito, pero sí una estrategia torpe cuando ha quemado a los rivales hasta puntos insospechados.
Pepe Torres se ha tomado de forma tan personal las elecciones y todo que no ha dejado que los vecinos vean las enormes cualidades que tiene Evelia García, una señora de la política, capaz de dedicarle todo el tiempo al Ayuntamiento y de desplegar una energía y un positivismo muy necesarios para cualquier sitio, también para Haría. Pero Torres, que es como es, y yo le reconozco un montón de cosas buenas, pero un cuarto de siglo mangoneando en Haría es demasiado tiempo, incluso para un genio de la estrategia, el conflicto y la retórica como él. Los electores no vieron a Evelia, solo vieron a Pepe. La PMH es Pepe y quien no quiere a Pepe no vota PMH. Y ese es el castigo de Evelia García. Aunque ella está muy agradecida a Torres Stinga, y no piensa en absoluto como yo. A veces una se equivoca también en su contra. Si Pepe quiere, el mayoritario voto nacionalista puede unirse. Pero, en esta ocasión, no se trata de que haga una estrategia sibilina, ni nada. Se trata de que dé un paso atrás. Que también es estrategia una retirada a tiempo. Y tiempo ha tenido un montón ya para hacer otras cosas. Ahora toca recapacitar con humildad y ver la viga en el ojo propio.
El electorado de Haría se movilizó y dejó un relato escrito que se puede leer de corrido: apostamos por una política más fresca, sin perder la orientación nacionalista ni la socialista. Alfredo se ha ganado un respeto entre su parroquia de izquierdas, sube votos, sube concejales y se mete de alcalde ante la división de nacionalistas. En el campo nacionalista, se prefiere a Chaxi y lo que representa, aunque sea fuera de CC, con su CompromisoXHaría, que a Víctor Robayna y lo que representa, aunque consiga remover Roma con Santiago para ser cabeza de una lista de CC que llevó del quinto concejal al único, sólo él. Entra, además, Nueva Canarias, con un concejal, Marcos Lemes, rodeado de sanitarios, con la exhibida voluntad de ayudar a curar la política de Haría, que quiere sanar después de años de mala praxis.
Ya están conformados los 7 ayuntamientos, Entramos ya, entonces, en tiempo de gestión. Se trata de analizar la realidad municipal y de armar una estrategia para atenderla en estos cuatro años de gestión. No pierdan el tiempo en otras cosas. Cuestan demasiado caros para que encima nos hagan perder a los ciudadanos tiempo y oportunidades.