RYNAIR "LE ROBA" 55 EUROS POR FACTURAR

El mundo se le vino encima cuando fue a entrar para pasar el control y no pudo porque había hecho, por error, el check in de la vuelta en lugar de la ida. Iba con el tiempo justo y eso significaba dirigirse a facturar y hacer cola.

La hizo todavía nervioso por el contratiempo. Pero todavía fue peor cuando al llegar al mostrador de facturación la señora azafata de tierra le informa de que tiene que ir a la oficina de Rynair a hacer el correspondiente pago. Fue y se puso en la cola de la ventanilla, desde donde oía los gritos de la pasajera que despachaba en ese momento. "Esto es un robo, es la última vez que viajo con ustedes". "Un robo, un robo, sí, un robo", se fue gritando la señora mientras se acercaba a la ventanilla quien precedía al pasajero que venía a Lanzarote en el vuelo de esta compañía a Lanzarote, a primera hora. Le tocó el turno, le explicó a la dependienta su situación y como única respuesta le dijo: "Son 55 euros, señor"

Como si hubiese sido poseído por el grito de guerra de la pasajera anterior, empezó a reproducir sus mismas palabras. "Esto es un robo, un robo, pero cómo me va q cobrar más por imprimirme la tarjeta de embarque que por el billete a Canarias, pero estamos locos o qué”. La dependienta le mira como si con ella no fuera la cosa y le dice que "en Rynair la facturación previa es obligatoria para todos los pasajeros".

Con los ojos inyectados de rabia, el pasajero le dice que sí, que entiende que le cobre el servicio de impresión pero que no puede cobrarse 55 euros, más que el precio del billete, por el papel que es imprescindible para volar y la única manera de hacerlo en ese momento.

• "Por favor, señor, son 55 euros".
• “Pero usted no se da cuenta que es un robo, que me está pidiendo 55 euros por una impresión, que es chantaje porque no se puede hacer en otro lado en este momento”
• “Señor, son 55 euros”
• “Pero…”
• “55, señor, 55 euros o deje pasar al siguiente pasajero”.

Y Rynair consumó su “robo”.