PUBLICIDAD

LANZAROTE, INSOSTENIBLE E INEFICIENTE

Nos hemos estado engañando todo el tiempo que hemos podido.

Pero ya no damos para más, hay que reconocer que no podemos ser más tontos. Hemos vivido con la idea de que éramos los más ecologistas, los más sostenibles y hasta los más “chachi” del mundo. Y solo porque cada vez venían más turistas a Lanzarote, gracias a su envidiable clima y espectacular paisaje, nada en lo que hayamos contribuido estas generaciones actuales de lanzaroteños, lanzaroteñas y asimilados. Más bien todo lo contrario. Nuestros políticos, que deben ser los líderes de la isla, no pasan de jefes de economatos de hiperdino, y son, por naturaleza, ineficaces: nada se hace por aquí, nada se hace por allí y sueldito y dietas para el bolsillo. Y cuando hacen algo, siempre eligen la propuesta con más costes, vía modificados, vía adjudicaciones de servicios posteriores. En fin, que se mueven entre ineficaces redomados e ineficientes convencidos.

Vayamos por partes, como Jack “El destripador”. En transporte público, por ejemplo, Lanzarote es un ejemplo mundial de insostenibilidad. En esta isla, el transporte de referencia es el coche particular, multiplicado hasta el infinito por los vehículos de alquilar, principal herramienta de los millones de turistas anuales para moverse por la isla. No es una casualidad que una de las principales empresas de Lanzarote, y una de las familias mejor asentadas en la burguesía local, se dedique al ramo. Y no es la única. Hay muchas de dentro y de fuera de la isla. El transporte público colectivo sigue sin funcionar, sin llegar con eficacia a los residentes, y huye de ser una alternativa a los coches de alquiler para los turistas. ¿Se explica una isla sostenible sin transporte público colectivo regular a los principales centros turísticos de la isla? ¿Con una deficiente conexión con el aeropuerto que mueve millones de viajeros anuales? ¿Se puede ser una opción al coche particular en pueblos que no tienen sino dos o tres servicios diarios de guaguas? El transporte de guaguas en Lanzarote lleva toda la vida gestionado por la misma familia, nunca se ha abierto de una manera clara a empresas con mayor experiencia y mejor resultados en Canarias el concierto público. La pregunta que deben hacerse desde el Cabildo, y ha dado igual que gobiernen populares, socialistas o nacionalistas, es si prefieren beneficiar a una empresa, a una familia, o a todos los lanzaroteños. Está clara cuál es la respuesta, pero nunca es tarde para coger el buen camino. Ahora, el transporte público es gratuito pero es que en Lanzarote tenemos un servicio que no llega, que no es alternativa. Está claro que esta situación tiene culpables pero lo que buscamos ahora son políticos que sean capaces de ser responsables del cambio. Pero nos tememos que no los hay.

Escribir un comentario

Código de seguridad
Refescar