AVUTARDAS CONTRA BÓLIDOS

El primer fin de semana de diciembre, dentro de apenas una semana, está previsto que se celebre el rallye de tierra que se suspendió hace unos meses por no conseguir las autorizaciones pertinentes.

En esa ocasión, el problema se dijo que fue la coincidencia con el periodo de nidificación de las avutardas, que ocupan uno de los paisajes más emblemáticos de la isla, el jable, que es por donde transcurre parte del recorrido de la prueba deportiva. Ahora, todavía hoy, nadie tiene la certeza de que finalmente se celebre ni de las consecuencias que puede traer para los autorizantes y organizadores que se celebre. La cosa está así. Más ahora que el hecho de que lloviera pronto parece que ha provocado que los machos de avutarda hubara se pongan gallitos y lancen todo su repertorio amatorio en busca de la hembra que le va a poner de uno a tres huevos con su sello personal.

La avutarda hubara es una especie de ave muy curiosa. Además de ser la mayor ave que anida en Lanzarote, que es sedentaria, corre más que vuela, al revés que los coches de rallyes, que están hechos para correr pero parece que van volando. El macho es casi tan galante como un pavo y abre sus alas y enseñas sus mejores colores para encandilar a la hembra en los tiempos de apareamiento. Pero, luego, como casi todos los que despliegan estas artes amatorias, no aparece por casa dejando a la hembra sola al cargo de la incubación de los huevos y del cuidado y alimentación de las crías. Aunque la gente se cree que se alimentan de granos, y por eso su distribución por las llanuras de Lanzarote y Fuerteventura, donde se encuentra la principal sementera, la verdad es que prefieren pequeños invertebrados, saltamontes y parecidos para saciar el hambre. Por eso son beneficiosos para los cultivos, porque ayudan a evitar plagas de  otros bichos perjudiciales. Es un ave grande, de piernas y cuello largo, que se mueve por las zonas de jable, donde hacen su vida y nidifican. Y son preciosas. Por lo que tener un poquito de cuidado y organizar los eventos teniéndolas en cuenta, no nos vendrá nada mal. Más todavía si sabemos que hay menos de quinientos ejemplares y es una especie protegida. Así que rallyes, sí, pero avutardas seguras también.