CUÉNTALES UN CHISTE PERO NO LE DIGAS NADA DEL NUEVO PLIEGO

El Cabildo, en comandita con la concesionaria del transporte regular de viajeros de Lanzarote, están en su estrategia de aparentar que están haciendo cosas a favor de dotar a la isla de un buen servicio de guaguas cuando, únicamente, están gastando dinero público en aparentarlo.

Lo que se necesita en Lanzarote son más rutas, más frecuencias, más guaguas y más seriedad política al tratar un tema fundamental para garantizar una movilidad segura, de calidad y eficiente a toda la población. Que nos podamos desprender del coche particular sin renunciar a movernos por la isla (¡que apenas tiene unos 800 kms2!), apostando por abaratar los costes del transporte de los trabajadores, disuadiendo a los más jóvenes y mayores de conducir si no se encuentran en condiciones físicas y psíquicas para hacerlo, bajando los niveles de accidentes, contaminación y las ansias de más carreteras.

Lo último, por el momento, es claramente de risa. Ante las quejas de los usuarios porque las guaguas van llenas, porque se quedan en las paradas o porque no se cumplen horarios o porque le hacen recorridos que tardan el doble de lo que deberían, han decidido que el bueno del humorista lanzaroteño Kike Pérez les cuente unos chistes. Que aunque les estén toreando, no se quejen. No vayan a molestar a los políticos de turno. Está claro que no se puede insultar a los chóferes ni tener comportamientos violentos. Casi tanto como que el servicio de transporte es claramente deficitario y que las quejas de los usuarios están más que justificadas, por muy inapropiados que sean sus comportamientos. Y que no están pidiendo chistes sino más guaguas.

Lo curioso es que en todos lados hacen campañas para que las personas usen las guaguas. Aquí las campañas, en cambio, son para que acepten con buen humor quedarse en tierra porque los políticos están en otra cosa. Que curiosamente es la misma cosa de siempre: a lo suyo y a lo de los amigos y amigas. En lugar de tanto chiste, apps de cientos de miles de euros de dinero público para saber por dónde van las guaguas que al final llegan llenas, lo que tienen que hacer es ir presentando el pliego que dicen que van a sacar y que ya han retrasado dos años, para ver si de una vez vamos a tener guaguas para mover a nuestra población o creen que va a ser suficiente con bajarnos el último chiste de Kike Pérez. Y es que para humor y quiebros, Domingo Cejas está demostrando que es insuperable. De agua, residuos, guaguas, aerogeneradores y demás está por demostrarse que quiera hacer algo distinto de lo que se venía haciendo y distante de los prestatarios de los servicios actualmente.

 Menos chistes, menos cuentos y más guaguas, Domingo. Haz un pliego que recoja las demandas de los lanzaroteños, de Ye a Playa Blanca, de La Santa a Las Caletas, en toda la isla, con regularidad eficiente, atendiendo los flujos laborales y de ocio de nuestra gente. Son los retos que convierten a políticos mediocres en políticos recordados. No estaría nada mal que los usuarios de las viviendas vacacionales de esta isla y  La Graciosa (también ellos), en el futuro, pudieran decir que, gracias a Cejas, Lanzarote tiene no solo VV sino también un transporte público para llegar hasta ellas de forma barata, segura y sin contaminación.