PUBLICIDAD

Las 300 llamadas que debería hacer Oswaldo

 

Oswaldo Betancort evidenció, de entrada, que los recursos que maneja para afrontar el reto de poner a trabajar al Cabildo en pro de los lanzaroteños son muy limitados. Nada que ya no conociéramos, pero sorprende que en lugar de dedicar estos primeros meses a trabajar de puertas a dentro para conocer los proyectos, organizar el Cabildo y buscar a las personas adecuadas con las que gobernar, se dedique a seguir jugando a un populismo trasnochado.

El hecho de ir a sacarse una foto en el hoyo de la carretera de El Golfo para que sus incondicionales digan que ya solucionó el problema raya entre lo pueril y la paranoia. El hoyo sigue allí y lo  único que tenemos es una foto más en el largo reportaje fotográfico de visitas del lugar por políticos de toda índole. Si esa es la dinámica de trabajo que se va imponer, no va a superar la pose de María Dolores Corujo, cuando apareció en un incendio en el bosquecillo con unas esclavas de playa la mar de monas. Pero que cada uno se suicide políticamente como quiera, que para eso en ello les va la vida. Pero está en juego también el futuro de todos.

Pero es que la idea de la consulta popular para ponerse un sueldo, donde el ciudadano va a poder elegir entre cantidades desorbitadas todas, me parece más propio de las guerras de Gila que de la política actual. ¿En qué mundo vive alguien que piensa que el ciudadano que pasa estrecheces todos los días va a priorizar ponerle un gran sueldo al político u otro mayor? En fin, que los de las trescientas llamadas para que opinen si 93.000 o 98.000 euros al año, y otras dos más parecidas, me parece un atentado a la inteligencia humana, solo defendible porque aquellos que piensan que decir que no es enfadar al chico de sus sueños.

Oswaldo debería hacer trescientas llamadas, sí, es verdad. Y debería hacerlas él personalmente y no dejarlas en manos de una consultora. Pero no para ver cuánto cobra él, que se ponga el sueldo en conciencia, sino para ver cómo puede ayudar a un montón de conejeros a vivir mejor. Que llame, por ejemplo, a un universitario de familia pobre para que le explique cómo vive. Que llame a un autónomo y le pregunte cuánto cotiza y para cuánto, que llame a un agricultor y le diga cuándo va a tener agua, que llame a un enfermo de cáncer y le pregunte qué puede hacer para aliviar su sufrimiento, que llame a un deportista le pregunte que necesita, que llame a un parado y le explique qué hay que hacer para ganas 90.000 euros anuales, que llame a un médico y le diga por qué cobra lo mismo que ellos, si ellos salvan vidas y los políticos se pegan vidorras, que llame a un juez y le pregunte como un alto cargo del cabildo puede compatibilizar de forma ilegal con la administración de su propia empresa en el mismo ramo, que llame al juzgado mercantil y pregunte si una empresa se puede disolver dejando una deuda de más de 600.000 euros en una empresa pública, en una gestión presuntamente fraudulenta, sin que nadie haga nada.

Oswaldo puede llamar a mucha gente en Lanzarote. Muchos estarían encantados en ayudarle a poner un transporte público más eficaz, a mejorar las infraestructuras, a aprobar los planes urbanísticos y medioambientales de la isla, a mejorar las vías. Pero Oswaldo, en lugar de llamar a su gente para interesarse por ellos y ayudarle a solventar los problemas comunes, les hace la primera llamada para que le ayuden a justificar un sueldo que puede ser todo lo legal que se quiera pero ni es justo ni responde a nada valorable todavía. Si Oswaldo y sus consejeros (otros que amasan pan para ellos y hambre para nosotros), creen que no podían llegar a fin de año cobrando lo mismo que los consejeros salientes, dejando la subida para la aprobación del nuevo presupuesto, y viéndose ya el andar de la perrita, es que no saben realmente cómo lo está pasando la gente de la calle.

Oswaldo puede llamar a 300 lanzaroteños y a los que quiera. Lo que cabrea es que lo haga pensando exclusivamente en salvarse él. Muy mal ejemplo para empezar un mandato. Si aprende la lección, ha valido la pena. Si se lleva por sus incondicionales y palmeros, solo habrá que esperar cuatro años más de ruina y de fotos para volvernos a ilusionar con otro. Sería la dinámica de siempre, tampoco nos vamos a engañar.  Mucho más cara (que los consejeros también tienen su subidita y callan como cobardes), pero como siempre.

Comentarios  

#1 . 18-07-2023 19:18
Muy buen artículo!
Citar

Escribir un comentario

Código de seguridad
Refescar