LA PROVOCACIÓN DE LOLI CORUJO A PEDRO SAN GINÉS Y SARAY RODRÍGUEZ

A la alcaldesa de San Bartolomé, Loli Corujo, se le han olvidado las normas esenciales de protocolo, cortesía y respeto que un cargo público le debe a otro, al margen de gustos, disgustos y colores políticos. O eso parece, si nos atenemos al desplante que le hizo ayer tanto al presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro san Ginés (CC), como a la consejera de Obras Públicas, Saray Rodríguez (PP), que se presentaron en el Ayuntamiento de esta localidad, previa visita concertada con la alcaldesa y se encontraron con el desplante de la misma al no aparecer. Y no es que no estuviera en Lanzarote, cosa excesivamente frecuente en el caso de la portavoz parlamentaria del PSOE, sino que priorizó otras cosas antes que el compromiso con el Cabildo. Y eso, a pesar de que la fecha la puso ella, al cambiar otra previa concertada por encontrarse fuera de la isla. Pero la intención de provocar de Loli, y de seguir jugando a la política sin importarle las inversiones que hace el Cabildo en su municipio, es que no sólo no apareció ella sino que dio orden a los concejales socialistas de que ninguno apareciera por el lugar para hacerle el vacío a los representantes del gobierno insular. Al final, el presidente del Cabildo y la consejera hicieron la visita a las obras que se están ejecutando en este municipio en compañía de los concejales de CC, que gobiernan con quien parece que siente vergüenza de este partido, David Rocío e Isabel Sosa, que tenían un cabreo mal disimulado por el feo que les  había hecho la alcaldesa delante del presidente del Cabildo, que además es el líder de su partido. David, que ejercer de alcalde la mayor parte del tiempo, e Isabel, que es, además, la secretaria local de CC, no supieron que explicación dar ni cómo esconder su propio cabreo ante el comportamiento desleal y malcriado de Loli. En cambio, Pedro San Ginés y Saray le quitaron hierro al asunto y no quisieron caer en la provocación de Corujo. Hasta el punto, de ofrecerse a volver al municipio y volver hacer el recorrido municipal cuando la alcaldesa tenga tiempo disponible para tratar los asuntos de los vecinos de San Bartolomé. En fin, de pena.